Mi Casa es su Casa
Estrategias para dar un mejor servicio a clientes que solo son efectivas si eres mexicano
De los espacios de Disney Walt Resort hasta mi propio negocio, me parece que tengo algunas experiencias que compartirles como emprendedora.
Para empezar, deja de llamarlos clientes!, a nadie le gusta ser parte del monton. Ponte a pensar cuando vas a un lugar, puede ser que la primera vez vayas a un lugar por que viste su anuncio o porque alguna persona te lo recomendo, en cambio dudo mucho que vuelvas si las personas que te atendieron te trataron mal, aunque el trabajo que te hicieron sea de muy buena calidad.
Cuando trabajaba en Disney como parte de politicas de la compañia tenía que estar sonriendo todo el tiempo, si algo notaban extraño en tu pesonalidad los managers te daban un brake o hablaban contigo para hacerte sentir mejor, al tratar con los invitados (como disney llama a sus clientes) ellos deben sentir la experiencia de estar en un mundo magico, pues esa es la imagen de Disney, nada debe hacerlos sentir enojados o tristes, por lo que tu como miembro puedes hacer uso de cualquier medio que tengas al alcance, incluso reemplazar mercancia que se les haya extraviado o comida que puedan comprobar se les cayo.
En mi propio negocio he descubierto que a las personas les gusta sentirse especiales, reconocidos, que son parte de tu marca, les gusta saber que colaboran contigo de algun modo, por ejemplo, cuando la cerveceria Cuauhtemoc Moctezuma lanzó una convocatoria para que diseñaran las latas de la cerveza INDIO.
A tus clientes les gusta ser recordados, llamalos por su primer nombre, no tengas miedo en preguntar por pequeñas cosas que conocen sobre su vida, que te hayan comentado en su meeting pasado.
Sorprendelos tanto como te sea posible, sin que el factor sorpresa se convierta en una rutina, puedes mandarles tarjetas de descuentos en sus compras, la posibilidad de que prueben tu nueva mercancia primero que nadie, pequeñas muestras, envios gratuitos, envolturas.
Siendo honestos en México somos grandes anfitriones, dejamos todo a un lado y no hay nada imposible cuando de consentir a las personas se trata, es tiempo de utilizar esa ventaja competitiva ante el resto del mundo.